LOCOMOTORAS    

Las primeras locomotoras se concibieron con la fuente de energía a vapor (también conocidas como de combustión externa) y fue muy trabajada en labores de extracción de minerales. Era la solución de la época y de ahí en adelante su clasificación se realiza por relación a su forma de propulsión. 

Es un equipo ferroviario que ofrece la energía para el movimiento propio como del tren a mover tanto de cargas como de pasajeros y mixtos; las del tipo "Diésel eléctrica" son de potencia constante en todas las gamas de velocidades que transita ya sea en perfiles ascendentes o descendientes. Es muy conveniente aplicar las cargas máximas de su diseño para la tracción de trenes disminuyendo así  pérdidas y  eficiencia,  por lo que hay que tener muy en cuenta al calcular su peso a arrastrar que sus parámetros no sean por debajo del mínimo, ni por encima del máximo requerido por su cálculo y construcción. Trabajar fuera de esas gamas de velocidades y potencia aumenta el consumo de combustible y acarrea problemas en la presión de combustión de los cilindros del motor Diésel con la  correspondiente humareda en el escape que de continuar puede producir secuelas muy dañinas en los sistemas del motor Diésel.